miércoles, 14 de mayo de 2008

De vuelta al insti



Sin duda la clase de ayer me hizo rememorar mis clases en el instituto. Me podría haber recordado las del colegio pues se trataba de una clase de matemáticas, sin embargo por mi experiencia traumática, me hizo recordar mi enseñanza secundaria.


Centrándome en la puesta en común tanto en pequeño como en gran grupo, era curioso ver como cada persona había seguido el proceso de diferente forma.


Una de las frases que más me han gustado ha sido cuando Ángel ha dicho “se recurre más a la memoria que al proceso”, eso me ha hecho darme cuenta la importancia y determinación que tienen unos esquemas, más bien patrones tan interiorizados. Estamos intentando comprender algo no desde la propia explicación, sino de lo que ya tenemos de lo que “aprendimos” en su momento. Eso es bien conocido por todos, a través de afirmaciones que solemos hacer de forma casi diaria, “nuestros alumnos poseen unos conocimientos previos que hay que tener en consideración”, pero de tener en consideración a que determinen su estilo de aprendizaje va un largo recorrido... Por eso, a medida que vamos continuando nuestro bagaje mas difícil resulta ir introduciendo nuevos conocimientos, especialmente aquellos que se muestran contrapuestos a los que ya poseemos. Hoy hemos podido ver más detenidamente esto, en el texto trabajado en clase me llamó especialmente la atención el siguiente apartado, que sintetiza lo que trato de explicar:



“De aquí la importancia que tienen las ideas previas o las nociones iniciales que se van elaborando sobre cada nuevo aspecto que se conoce. Estas ideas condicionan el proceso de aprendizaje. Por lo cual es importante revisar y analizar como presentamos cada ampliación de los conceptos y como los aprendices van incorporando estos nuevos aspectos en su noción anterior.”


Algo que me dejó pensando fue cuando, en una de las múltiples cuestiones a las que nos tiene acostumbrado Alejandro, se pregunto ¿dónde está el umbral (cuando no comprendemos)? Sin duda es interesante, porque en un momento dado nos hacemos conscientes que no estamos comprendiendo algo, pero sin duda o para mí lo es, ¿qué respuestas damos ante tal situación? Puede ir desde la frustración, el pasotismo, como a la motivación por querer entender lo que se nos expone. Porque, la motivación y el interés depende en nosotros, pero ¿por qué algo nos interesa o no? Esta pregunta también se lanzó en clase, en mi opinión dependen de diversos factores, desde los de tipo ambiental, es decir, contextuales a los más personales y a su vez se subdividirían en físicos y psicológicos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola Silvia

Excelente reflexión. Resulta muy difícil acomodar nuestras estructuras previas, si sólo asimilamos, no terminamos de aprender, sólo confirmamos lo que ya sabíamos o íbamos sabiendo. De ahí que acomodar implicar ir más allá, implica desde luego patrones de pensamiento que impliquen construir o crear novedad. Y eso no es ni fácil, ni sencillo ni cómodo. Seguir procedimientos, fórmulas, reglas, protocolos, es más sencillo, pero menos generativo.

Me alegro mucho de que hayas enfatizado estos aspectos.

Un saludo

Alejandro

¡Bienvenidos/as!

Ante todo daros las gracias por consultar mi blog, espero que esto sea el comienzo de la elaboración de un gran espacio de concimiento en el que todos podamos aprender. Silvia